110 años sin el beato Marcelo Spínola
Marcelo Spínola y Maestre, el que fuera Cardenal arzobispo de Sevilla, partió a la Casa del Padre hoy hace 110 años, cinco días después de cumplir 71 y tras haber recibido la birreta cardenalicia de manos del rey Alfonso XIII tan sólo 19 días antes. Y la Iglesia reserva en la jornada de hoy un lugar del santoral para este abogado de los pobres que orientó su entrega a los más necesitados, primero en el ministerio sacerdotal y más adelante en el episcopado.
Nacido en san Fernando (Cádiz) el 14 de enero de 1935, se licenció en Derecho por la Universidad de Sevilla y estableció un bufete en Huelva. Ordenado sacerdote en mayo de 1964, celebró su primera misa en la Iglesia de San Felipe Neri de Sevilla y desempeñó sus primeros cargos de responsabilidad pastoral en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). Entre 1871 y 1879 fue párroco de San Lorenzo, en Sevilla, y posteriormente canónigo de la Catedral hispalense.
El Papa León XIII le designaría Obispo de Coria-Cáceres el 10 de noviembre de 1884. Este sería el primero de los tres nombramientos episcopales que recibiría mons. Spínola, que dirigió además las diócesis de Málaga y Sevilla, esta últim a desde el 11 de febrero de 1896. Al frente de la sede de San Isidoro estuvo una década, en la que fue reconocido por los sevillanos por su humildad y entrega a los más necesitados.
Además, en su haber destacan algunas iniciativas que hoy siguen vigentes. Es el caso de la fundación junto a Celia Méndez de la Congregación de las Esclavas del Divino Corazón, la creación del actual decano de la prensa sevillana, el Correo de Andalucía, y la concordia entre las hermandades de la Esperanza Macarena y el Gran Poder.
Arzobispo beato
Marcelo Spínola fue beatificado por san Juan Pablo II el 29 de marzo de 1987, cinco años después de que el pontífice orara ante su tumba en el curso de su primera visita a Sevilla, el 5 de noviembre de 1982. 110 años después de su muerte, sigue viva la memoria del beato Spínola, el ‘arzobispo mendigo’.