‘Un amor que no termina’, el proyecto de la Pastoral Familiar dirigido a personas divorciadas
La Pastoral Familiar de Sevilla, como respuesta al aumento año tras año de las demandas de divorcio y separaciones entre los matrimonios, puso en marcha hace un par de años este proyecto dirigido a acompañar a personas separadas y divorciadas no vueltas a casar ni convivientes.
Según explican fuentes de la Delegación diocesana de Familia y Vida “la atención pastoral de las personas separadas no casadas de nuevo, así como los divorciados civilmente y no casados de nuevo, es originada por situaciones de dificultad matrimonial que presentan elementos concretos y por consiguiente deben tener un tratamiento específico”.
De esta forma, con esta propuesta pastoral se pretende que puedan experimentar la mano cercana de la Iglesia, y ofrecer cauces para que “descubran que Dios no les ha olvidado, sino que se hace especialmente presente en su situación, invitándolos a transformar esta nueva etapa en un motivo de crecimiento en su camino de santidad”.
Así, destacan las informaciones de la Pastoral Familiar, el objetivo principal del Proyecto “Un amor que no termina” es ayudar y dar apoyo al cónyuge que se mantiene fiel a su vocación y “a encontrar la paz, para seguir construyendo con sus hijos un hogar cristiano”.
Para ello se celebran citas periódicas, como jornadas de retiro y encuentros de grupos mensuales estructurados en varios momentos: un primer espacio de oración con la Palabra, otro tiempo de carácter formativo y, finalmente, las reuniones concluyen con un espacio de adoración ante el Santísimo Sacramento.
El primer retiro de este curso está previsto para finales del mes de octubre.
Más información en p.familiar@archisevilla.org