El Arzobispo clausura el año jubilar del monasterio de Santa María de Jesús
La tarde de ayer domingo tuvo lugar la Eucaristía con la que se clausuró el año santo jubilar concedido por la Santa Sede a las religiosas clarisas por el 500 aniversario de la fundación del monasterio de Santa María de Jesús.
La Misa, un acto especialmente preparado por las veinte religiosas que conforman esta comunidad clarisa, fue presidida por el Arzobispo, monseñor Juan José Asenjo, y en el acto participó el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, así como diversos representantes del ámbito cofrade y personas vinculadas con las monjas.
Quinientos años de clausura, cinco siglos de oración y trabajo en comunidad. Y una ocasión para dar gracias a Dios. Este es, en esencia, el mensaje que las veinte religiosas que habitan el convento de Santa María de Jesús han querido transmitir dese que se abriera el año jubilar que la Santa Sede ha concedido a esta comunidad de clarisas a petición del Arzobispo de Sevilla. El acto inaugural tuvo lugar el 11 de enero de 2020.
Sobre las clarisas de la calle Águilas
Las clarisas forman parte de la rama femenina de la orden franciscana y dedican su vida a la contemplación en un espíritu de pobreza y entrega absoluta a la oración y a los demás. La fundación del Convento de Santa María de Jesús, en pleno centro de Sevilla, se remonta a inicios del siglo XVI. Actualmente, su iglesia permanece abierta por la mañana con exposición del Santísimo y los lunes por la tarde, siendo el culto a San Pancracio uno de los focos importantes de la devoción popular sevillana.
Entre las ocupaciones de las religiosas están la elaboración de dulces según es tradición en las clarisas, labores que ayudan al sostenimiento de la comunidad. La misa conventual es a las ocho de la mañana los días laborables, mientras que los sábados, domingos y festivos es a las diez.