Participación, corresponsabilidad y presencia en la vida pública, temas centrales del proceso sinodal en Sevilla
Tras la celebración de la primera sesión de la Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos en octubre del año pasado, el proceso sinodal continúa hacia la segunda sesión el próximo mes de octubre. En esta línea, la comisión diocesana y el equipo de síntesis diocesano tuvo un encuentro la tarde de este martes 9 de abril en el aula Marcelo Spínola, del Palacio Arzobispal.
En clima de oración, el equipo de síntesis, compuesto por cincuenta y seis personas que representan las diversas vocaciones, pastorales, grupos y ámbitos eclesiales, con experiencia de trabajar en comunión en este proceso sinodal respondieron a la interrogante de qué poder seguir haciendo a nivel local, diocesano y nacional para seguir aprendiendo la sinodalidad, de la mano de la comisión diocesana del sínodo compuesta por Óscar Díaz, vicario episcopal para la Nueva Evangelización; Enrique Barrera, vicario episcopal Sur, Mariano Pérez de Ayala, presidente de Cáritas Diocesana; María Albendea, presidenta-delegada de Manos Unidas Sevilla y Enrique Belloso, delegado diocesano de Apostolado Seglar.
En este sentido, Belloso ha explicado que “en un ambiente de comunión” han podido trabajar el cuestionario y vivir “un momento de gracia”, poniendo el énfasis en tres grandes temas: Participación, corresponsabilidad y presencia en la vida pública de laicado, con especial énfasis en mujeres y jóvenes.
Formación y participación
A modo de conclusión, el equipo de síntesis, “ha vuelto sobre los temas ya tratados en los grupos de trabajo del sínodo sobre la importancia de la formación y la participación”. Sobre este último aspecto, el delegado diocesano de Apostolado Seglar dijo que “ha salido en todos los grupos la necesidad de que la participación se concrete en los entornos parroquiales dentro de los consejos pastorales, sobre sus objetivos, formas de participación y cómo apoyar toda la pastoral de una parroquia”.
Las reflexiones giraron en torno a la necesidad “de ser Iglesia que escucha y acompaña para llegar a todos”. A nivel parroquial, “han de actualizarse y modernizarse las formas de estar presente en la vida del barrio y en las familias”. Sobre el ámbito diocesano, el equipo de síntesis ha valorado la importancia “de mantener la presencia de las hermandades y fomentar la presencia de los movimientos, buscando siempre espacios de diálogos con todos”.
En relación a la formación, Enrique Belloso ha precisado que, “aprovechando los métodos de Primer Anuncio, hay que volver a lo esencial para que muchas personas pueden encausar la vivencia de su fe”. En el fondo de todo esto está “una Iglesia que camina junta y humilde, que escucha y acoge”, afirmó.
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