Archidiócesis de Sevilla

La Virgen con el Niño, San Roque y San Sebastián: éste es título del cuadro de Bernardino Luini (1480-1532), un pintor  italiano influido por Leonardo de Vinci. Se encuentra en la parroquia de Santa María de Mesa, de Utrera (Sevilla). Ha sido restaurado recientemente en el  Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), de Sevilla. Las manos expertas de los restauradores del IAPH han hecho posible la consolidación de esta obra, que llegó muy deteriorada a sus talleres.

Aparece en el cuadro la Virgen, que sostiene con sus dos manos al Niño, que está apoyado en las rodillas maternales, mientras que éste alarga su pequeña mano izquierda para coger el bordón que lleva San Roque. Las facciones de la Virgen son parecidas a otras obras de Vinci, así como el vuelo del manto en su postura sedente. Entre el Niño y San Roque hay un diálogo silente de las miradas que se cruzan. A la derecha de la Virgen está la figura de San Sebastián, que mira hacia arriba en un gesto de entrega suprema en el martirio. Al fondo hay un paisaje de un montículo poblado de arbolado, en cuya cima se ve un castillo.

Es una de las obras más significativas de la pintura italiana que se encuentran en esta diócesis. En el estudio detallado que se hizo de esta pintura en el Instituto a su llegada para la restauración, se hacía notar el contraste de la calidad extraordinaria de su ejecución, cercana a Leonardo de Vinci,  con la rigidez de su esquema compositivo, basado en líneas paralelas verticales, que entronca con la tradición lombarda cuatrocentista. Esto le lleva al informe del IAPH a adelantar la fecha que se había dado anteriormente para esta obra, de 1524-1525 a 1521. En el informe se termina diciendo: “Creo percibir en la relación establecida entre la Virgen y el Niño –María sujeta a su Hijo mientras éste fija su atención en la vara de San Roque-  ecos del dibujo de Leonardo para la perdida Virgen del Gato (Museo Británico de Londres)”.

En una palabra, esta pintura de la parroquia de Santa María de Mesa de Utrera, es una de las más significativas y, seguramente, menos conocidas de la rica colección de obras pictóricas que  se conservan en las iglesias de la diócesis de Sevilla.

Fernando Gª Gutiérrez, S.J.

Delegado Diocesano de Patrimonio Cultural