Archidiócesis de Sevilla

Cuentos, poesía, autoayuda, espiritualidad, vocación, amor. ‘Las conversaciones que tenemos pendientes’ (Ed. Universo de Trapo), el primer libro publicado del sacerdote diocesano Carlos Carrasco Schlatter, no deja ningún tema en el tintero. El nieto del creador del programa radiofónico Saeta se estrena en el panorama literario con una obra breve y sencilla pero de gran calado, que se acerca al lector desde una espiritualidad cotidiana, inspirada en la Biblia y en las propias experiencias del autor.

El Arzobispado ha acogido esta mañana la presentación de este libro. Un acto que ha contado con la presencia de monseñor Asenjo Pelgrina, Arzobispo de Sevilla, y uno de los editores del libro, José Sánchez Hidalgo.

La primera intervención ha corrido a cargo de Schlatter, que ha introducido su obra explicando de dónde nace su inspiración y ha terminado de forma original: narrando una relato inédito. En segundo lugar, Sánchez Hidalgo ha explicado la forma de trabajar de la editorial Universo de Trapo y el proceso de edición de la obra. Ha aprovechado para agradecer a todos los que han hecho posible esta obra. Por último, el Arzobipo ha cerrado el acto destacando la sensibilidad literaria y social del autor, cuya obra le ha recordado a las Confesiones de San Agustín.

El libro puede adquirise en la Librería diocesana, sita en el edificio del Arzobispado (c/Virgen de los Reyes, s/n) y todo lo recaudado con su venta irá destinado a una obra social.

A continuación, una entrevista con el autor, el sacerdote diocesano Carlos Carrasco Schlatter. :

Pregunta: Primera cuestión, indispensable ¿Qué conversaciones tiene pendiente Carlos Carrasco Schlatter?

Respuesta: Muchas (ríe), con los míos, con Dios y con el lector. Pero éste es un libro que no está completo, es decir no tiene todas las respuestas. Espero que la gente sea la que cierre esas respuestas, que me discutan o que encuentren la moraleja de cada cuento.

P: Aunque ésta es la primera obra que publica, la afición a la escritura no es nueva.

R: Efectivamente, no lo es. Llevo escribiendo toda la vida, especialmente desde el diaconado, hace diez años. Sin embargo, publicar ahora ha sido provocado por las personas que me rodean, que me animaron a dar el paso, así como el testimonio de mi tío, que ya ha publicado cinco libros.

P: ¿Cómo ha sido el proceso de creación de la obra?

R: El origen eran 30 textos que escribí en apenas seis meses, pero fuimos descartando hasta quedarnos en los 21 presentes en el libro -5 cuentos y el resto reflexiones con un estilo más homiléticos. En cuanto al proceso de edición y publicación ha sido más lento y complicado, y nos ha llevado más de un año y medio.

P: En el libro, además de una cuidada prosa, encontramos principalmente relatos y poesía, ¿por qué estos géneros?

R: Básicamente porque escribo por necesidad personal y espiritual, para desarrollar lo que en mi oración nace.  Por eso, a veces surge la poesía, género que expresa mejor el sentimiento; y otras la prosa, nacida de una idea. Con este libro, igualmente, descubrí que de la meditación también surgieron algunos cuentos, relatos que expresan distintas realidades de forma sencilla y clara.

P: Compartir sentimientos mediante la poesía y transmitir ideas a través de la prosa ¿Qué busca con su obra más allá de estos objetivos?

R: La idea general es que desde el encuentro personal con Dios, uno alcance el sentido de la vida, en cuanto a no conformarse, buscar nuevos objetivos o consolidar un compromiso personal y social. Quería hablar de las cosas del hombre y del autoconocimiento para poder crecer y acercarse a Dios. Por mi parte, he experimentado un descubrimiento personal brutal al escribir el libro, y aunque no se trata de una autobiografía, hay mucho mío en sus páginas.

P: El libro se compone de 21 textos, ¿con cuál se queda?

R: Es muy difícil contestar a esa pregunta. Depende de para qué. Si quieres entender cuál es el sentido de la vida cristiana, recomendaría leer ‘La historia de una gota de rocío’; Si hablamos de vocación, es de obligada lectura ‘Los múltiples rostros de la vocación’; Y si buscas descubrir al Dios que yo amo, es imprescindible ‘Una aventura que merecerá la pena vivirla, amarla’. En definitiva, el libro trata de amor y de amar, y pretendo explicar un poco mejor lo que he aprendido sobre esto desde mi oración y mi vida.

P: Con un lenguaje sencillo y cercano Dios se hace presente en cada una de las páginas del libro, la espiritualidad cristiana cruza de manera trasversal todos los textos, bien de forma explícita o velada. ¿Es por tanto, una obra pensada sólo para creyentes o busca acercarse también a los alejados?

R: Podemos decir que es apto para todos los públicos, para todas las personas de buena voluntad a las que aspiro a ayudar de algún modo, pero inevitablemente es un libro cristiano, inspirado en la Biblia.

P: ¿Qué puede contarnos sobre la portada de la obra? Sin duda, no deja indiferente a nadie…

R: Universo de Trapo lleva a cabo una misión en Honduras que atiende a niños marginados en centros de cuidados paliativos. La misión echó cuentas y entendió que la mayor parte de sus recursos iban destinados a la compra de féretros para los niños. Por ello, hablaron con un grupo de mujeres que fabrican vasijas de barro, que desde entonces se destinan a guardar las cenizas de los difuntos. Para mí, estas vasijas recogen la trascendencia que buscaba plasmar en el libro. Aprovecho este punto para agradecer a Universo de Trapo esta oportunidad, en especial a José Sánchez, Pedro Sosa, Adolfo Langa y Xabier Bartomeu, entre otros colaboradores; así como al convento de Sta. Mª la Real, de las monjas dominicas, en Bormujos, por su paciencia y oración; y a mis familiares y amigos que me han empujado a escribirla.

P: ¿Podemos decir, Carlos, que éste es el primero de muchos?

R: No lo sé. El primero tiene tanta carga del Dios que me dio la vida que no me parece propio hablar de otros porque aún queda mucho que decir sobre este.

Galería fotográfica de la presentación