Apostolado Seglar trabaja ya en propuestas eclesiales para el final de la pandemia
La Delegación Diocesana de Apostolado Seglar trabaja ya en la presentación al resto de la Archidiócesis, tan pronto como las condiciones derivadas de la pandemia del coronavirus lo permitan, de las conclusiones del Congreso Nacional de Laicos que se celebró en Madrid el pasado mes de febrero, unas conclusiones que podrán tenerse en cuenta en las futuras Orientaciones Pastorales Diocesanas. Este fue el principal acuerdo de la reunión de la Comisión Permanente de la Delegación que se celebró de forma virtual el pasado lunes
Lógicamente, el contexto social que vivimos estuvo muy presente en las deliberaciones de este órgano, y se plantearon acciones concretas “pensando sobre el futuro con creatividad”, según expuso de delegado, Enrique Belloso. Estas líneas de trabajo serán concretadas en la próxima cita de la Comisión Permanente, fechada para el 30 de abril. No obstante, ayer se avanzaron algunas, entre ellas la propuesta ‘Camino a Pentecostés’ para la segunda quincena de mayo, con diversas actividades online. Además, se retomarán las sesiones aplazadas o pendientes del Seminario de Estudios Laicales ‘Miguel de Mañara’. Por otro lado, se propondrá al Arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, la celebración de la solemnidad de Pentecostés “de la forma que sea posible”.
«Hemos de conservar la alegría»
En alusión directa a la incidencia de la pandemia en nuestra sociedad, los miembros de la Permanente subrayaron que “a pesar de la situación provocada por el Covid-19, los católicos hemos de estar alegres, porque la alegría es fuente de vida cristiana. Hemos de conservar la alegría, incluso en tiempos de muerte, estando cerca de quienes sufren, pero manifestando nuestra esperanza”, apuntaron.
«Ofrecer a la Iglesia como punto de referencia seguro»
Enrique Belloso afirmó que “estamos en un momento de mucha inventiva, de mucha creatividad, para recuperar la memoria y para preparar el futuro repartiendo semillas de esperanza, como plantea el Papa Francisco”. Además afirmó la conveniencia de “ofrecer a la Iglesia como punto de referencia seguro al mundo perdido ante un acontecimiento inesperado”. Para ello, abogó por proponer iniciativas que testimonien la unidad y la capacidad de reacción de la Iglesia, del laicado comprometido: “trabajando en la emergencia, conectando las mejores inteligencias y comunicando el trabajo, testimoniando que los unos estamos al servicio de los otros. Por ello –concluyó-, es necesario pensar en lo que viene después, ello es importante para no estar desprevenidos”.
La Comisión Permanente reúne en comunión al laicado sevillano junto a los más de 70 movimientos y asociaciones laicales que desarrollan su tarea de evangelización en la Archidiócesis. A ella pertenecen en la actualidad los responsables diocesanos de Cursillos de Cristiandad, Focolares, Equipos de Nuestra Señora, Comunidad de Vida Cristiana, Camino Neocatecumenal y Renovación Carismática. También, pertenecen personas vinculadas a Seglares Claretianos, Institución Teresiana, Regnun Christi, así como, algunos laicos comprometidos.