Varias son las consecuencias negativas que puede haber traído la pandemia para la vida de las familias: muerte de un familiar, enfermedad, pérdida de trabajo o incertidumbre laboral, etc. En todas estas situaciones es posible encontrar un elemento que ayude a vivir estos momentos de otra forma, porque “las dificultades si son compartidas, son menos pesadas de llevar.”
Y es que, como nos dicen en el artículo de Aleteia que compartimos, “El afecto es clave para una buena convivencia familiar y es un bien de primera necesidad para quien está sufriendo en una situación tan complicada como las generadas por esta pandemia.”