Archidiócesis de Sevilla

En medio de las dificultades y necesidades de conversión, para ser más creíble la propuesta de Jesucristo, la Delegación ha ido haciendo a través de la reflexión y de la práctica cotidiana unos principios orientadores en su compromiso con la comunidad gitana y que afectan a cuantos somos corresponsables de la Pastoral Gitana.

Quienes queremos vivir nuestra vida y realizar nuestro compromiso cristiano en esta Delegación,creemos que los medios deben traducirse en actitudes que hablen de nuestro profundo convencimiento y entrega a este proyecto que tiene su centro en JESUCRISTO y el ANUNCIO del EVANGELIO.

1. Ser misioneros, esto es, sentirnos anunciadores de la Buena Noticia a todos, pero especialmente a los gitanos.
2. Ser profetas. La realidad de la comunidad gitana es injusta y contraria al mensaje de Jesús, por eso los que formamos la Delegación tenemos que denunciar proféticamente el atropello de los más débiles.
3. Ser acogedores. La acogida que Jesús hace, incluye también la invitación a participar en la comunidad de sus amigos, esto es a animarles a que se vayan incorporando a sus comunidades parroquiales y hermandades, para así poder vivir mejor el encuentro con Jesucristo y con el no-gitano.
4. Ser creadores de una Pastoral Celebrativa. Teniendo en cuenta la idiosincrasia de la comunidad gitana y reconociendo el valor de la familia que todavía conservan, ver de qué forma implicamos a toda la familia en todas las celebraciones litúrgicas, sobre todo en los bautizos, bodas y misas de difuntos, etc.

Como bien sabemos y hemos experimentado, la celebración del Aniversario del beato Ceferino, se ha convertido en nuestra Iglesia diocesana y para la Comunidad Gitana Católica en un acontecimiento de primer orden. Este será uno de los principales encuentros que nuestra Delegación tiene previsto realizar junto con otras jornadas de encuentro y formación que se adaptarán al calendario diocesano, a lo largo del curso.