De Alfonso X a nuestros días, una cantiga a la Virgen de los Reyes
«Santa María, bendita seas, claro espejo de la santa Iglesia, los cristianos en ti se miran, tú eres espejo de su vida…» Así comienza la cantiga de Alfonso X el Sabio dedicada a la Virgen de los Reyes, que se entona en la Catedral cada día de la novena y en la misa estacional que se celebra tras la procesión de la patrona por los alrededores del templo metropolitano.
Esta cantiga se introdujo en los cultos de la patrona haca varias décadas, cuando se reformó la novena y se sustituyó el formulario que venía utilizándose desde el episcopado del cardenal Segura. José Márquez, canónigo honorífico del Cabildo Catedral de Sevilla, afirma que «fue un verdadero acierto rezar ante la imagen fernandina con las mismas palabras con que lo hiciera Alfonso X el Sabio«. Márquez destaca también la aceptación popular que esta cantiga ha tenido, en parte debido a que se trata de una oración «tan sencilla, tan ingenua y tan bonita».
Aclara que su contenido ha tenido que ser adaptado, partiendo del original escrito en galaico-portugués hace más de setecientos años. La música, por su parte, ha sido tomada de otra cantiga, la número 100, ‘Santa María, estrela do día‘.
La cantiga a la Virgen de los Reyes se entona cada día de la novena (matinal y vespertina) terminado el rezo del Rosario y antes del canto de entrada de la misa. En la misa estacional de la mañana del 15 de agosto se canta también, tras la segunda lectura y el canto del Aleluya, a modo de secuencia. Habitualmente se entonan las tres primeras de las cinco estrofas de la cantiga.
Santa María, bendita seas
claro espejo de la santa Iglesia
los cristianos en ti se miran
tú eres espejo de su vida
tú reflejas la luz divina
luz de Cristo, pura y bella
Santa María, bendita seas
claro espejo de la santa Iglesia
tú, ejemplo de viadores
tú, amparo de pecadores
tú, consuelo de nuestros dolores
Virgen santa, rosa bella
Santa María, bendita seas
claro espejo de la santa Iglesia
Tú la rama y tu Hijo la flor
que llena la Iglesia de suave olor
Y pan de vida confortador
flor y trigo nacido de ella
Santa María, bendita seas
claro espejo de la santa Iglesia
de los mártires, luz y corona
de las vírgenes, lirio y aroma
de Sevilla, Madre y patrona
torre de marfil, firme y bella
Santa María, bendita seas
claro espejo de la santa Iglesia
Oh Señora, Virgen María
supla la gracia tan pobre valía
llévanos a tu compañía
tú eres luna, sol y estrella
Santa María, bendita seas
claro espejo de la santa Iglesia