Archidiócesis de Sevilla

En el Evangelio de San Lucas podemos leer "El niño crecía y se robustecía, llenándose de sabiduría y la gracia de Dios estaba sobre él, (…), y su madre guardaba todas estas cosas en su corazón".  Testigo de su hijo, esencia pura del papel de la madre, una mujer,  María. Sin ella, nos dice el Papa Francisco, en La Alegría del Evangelio, "no terminamos de comprender el espíritu de la nueva evangelización; en su imagen de mujer y madre están todos los misterios del Evangelio". María, mujer y madre; en Belén, tierna protectora, en Caná, protagonista, y en Jerusalén, consoladora. María, una mujer, es "signo de esperanza para los pueblos que sufren dolores de parto hasta que brote la justicia".

El día 8 de Marzo se celebra el Día de la Mujer. Quisiera destacar este día el papel esencial de la mujer en el mundo, y reivindicar también su consideración a todos los niveles, su imprescindible contribución, y la condena absoluta de todas las condiciones que llevan hoy a su sufrimiento en muchos países.  Cuando se celebra el Día de algo, es que hay carencias y se manifiestan en dicha celebración. Donde hay guerras, la mujer es la que más sufre; donde hay pobreza, la mujer es la que más la soporta; donde hay hambre y sed, la mujer es la que más padece, porque seguro lo da todo. En nuestro mundo civilizado, pretendidamente desarrollado, las diferencias en nivel de paro, salario, años necesarios para una jubilación, y nivel de consideración de su papel al más alto nivel, castigan a la mujer en una injusta segregación.

Las mujeres hoy, las que trabajan, tienen que coordinar trabajo, labores domésticas y, a veces, dependencias familiares, mostrando una difícil conciliación familiar, atenuando dependencias muy severas, con ayuda escasa de las instituciones. No se puede frenar la ayuda a la dependencia. La mujer, generadora y portadora de vida, ha tenido siempre un papel esencial en la conservación de la Naturaleza en todo el mundo, y la ha defendido, por su valor intrínseco y por lo que representa para los suyos, siempre velando por los que la rodean.

Recientemente, el Papa Francisco ha manifestado estar "convencido de la urgencia de ofrecer espacios a la mujer en la vida de la Iglesia” y pidió “una presencia femenina más capilar e incisiva en la comunidades”. También afirmó que “la Iglesia es mujer, es ‘la’ Iglesia, no ‘el’ Iglesia”, y expresó que le agradaba describir la dimensión femenina de la Iglesia como seno acogedor que genera y regenera la vida”. El Papa ha celebrado que se haya superado el antiguo modelo de subordinación social de la mujer al hombre, aunque precisó, y debemos meditar y actuar en consecuencia,  ya que "todavía no se han agotado del todo los efectos negativos de ese modelo que ha perdurado durante siglos".

Celebremos, este 8 de Marzo, el esencial papel de la mujer en el mundo, de lo local a lo global, esencia de sostenibilidad, y pidamos por que la segregación en determinados aspectos sociales que sufre termine y que los desastres del mundo, que tanto afectan a la mujer, cesen para siempre. Muchas felicidades a las mujeres, y, especialmente, a las que han nacido este día.