El Arzobispo bendice las nuevas instalaciones del Centro de Estimulación Precoz Cristo del Buen Fin
El pasado 28 de septiembre se celebró el acto de bendición de las nuevas instalaciones del Centro de Estimulación Precoz Cristo del Buen Fin, a cargo del Arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo. La Iglesia de San Antonio de Padua acogió la celebración de la Eucaristía con este motivo, y el centro se encuentra en el que fuera Convento de los Franciscanos, cedido para tal fin por la Orden de Frailes Menores.
En la actualidad el Centro de Estimulación Precoz Cristo del Buen Fin atiende a más de 250 menores de seis años nacidos con capacidades distintas. A lo largo de sus 35 años de existencia han pasado por el mismo más de 2.500 familias.
Las nuevas instalaciones, que constan de más de 550 metros cuadrados, cuadruplican la extensión de las anteriores y cuentan con diez salas de terapia más una de formación. Ello permitirá ofrecer un tratamiento más efectivo y en un futuro posibilitará atender a un mayor número de niños. Todas las salas están dotadas del más moderno material técnico.
La Estimulación Precoz, encaminada en el campo de la Atención Temprana, es un tratamiento multidisciplinar que pretende, en menores de muy corta edad afectados de plurideficiencias, la rehabilitación de las áreas afectadas: cognitiva, del lenguaje y comunicación, del sistema motor, grueso y fino, de la socialización y autocuidado, etc. Los programas utilizados inciden en la realización de ejercicios para estimular el desarrollo mental, los músculos, nervios y sentidos del niño.
Doce profesionales, sumados a la labor altruista de los responsables del Centro, hacen posible este servicio a personas muy necesitadas de un tratamiento profesional de primer nivel. La prestación de estos servicios asistenciales es totalmente gratuita, y las fuentes de financiación se resumen en las aportaciones de la Hermandad del Buen Fin, las cuotas periódicas de los socio-protectores, las ayudas de las administraciones públicas y donaciones de personas, entidades e instituciones privadas de todo tipo. No obstante, la hermandad solicita ayuda para hacer frente a la importante inversión realizada, disponiendo a tal efecto una cuenta corriente en La Caixa.