El Seminario de Estudios Laicales plantea el debate de las experiencias virtuales en los planos formativo y evangelizador
La celebración durante la pasada semana del Seminario de Estudios Laicales ‘Miguel Mañara’ en un formato virtual, adecuado a la situación derivada del estado de alarma, supone un avance en las dinámicas pastorales y formativas de las delegaciones diocesanas, en las que ya se habían observado iniciativas que aprovechaban las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías. Sin ir más lejos, destaca la numerosa oferta de misas y cultos que han ofrecido en streaming parroquias y hermandades de la Archidiócesis desde que se decretara la imposibilidad de celebrarse con la participación de los fieles.
En el caso del Seminario de Estudios Laicales (SEL), desde la Delegación Diocesana de Apostolado Seglar se apostó por una fórmula que, una vez repasadas las estadísticas, se ha revelado como un acierto. Las cuatro ponencias (una mesa redonda y tres conferencias) han contabilizado un total de 2.134 visualizaciones, una cifra que, a bote pronto, supone un aumento considerable de la audiencia potencial de unas ponencias que en condiciones normales se celebrarían en un aula con un aforo limitado. Pero Enrique Belloso, delegado diocesano de Apostolado Seglar, va más allá y ha subrayado el contexto de cambio que se está poniendo de manifiesto con ocasión de esta pandemia: “Por decirlo con palabras que todos entiendan, estamos en un proceso de renovación, en pleno cambio de época, para ofrecer a todos, el mensaje siempre vivo de Jesús”. En esta línea, desde la Delegación se ha comenzado una nueva dinámica “donde –añade- iremos concretando las diversas iniciativas propuestas”.
Éxito de la mesa redonda sobre la mujer en la Iglesia
Volviendo a la iniciativa del SEL, la mesa redonda inaugural sobre la misión y vocación de la mujer en la Iglesia, que se celebró la tarde del 18 de mayo, fue el evento que mayor audiencia concitó. Hasta el día de hoy son 1.126 las visualizaciones registradas en el canal diocesano en youtube por una sesión que contó con las intervenciones de tres mujeres representativas de distintas sensibilidades de la Iglesia en Sevilla.
Se trata de una dinámica que ha llegado para quedarse, conscientes de que lo virtual no sustituye procesos de contacto personal. Como destacara el Arzobispo en su alocución radiofónica del pasado miércoles, “a la par que alcanzamos logros técnicos mayores, el materialismo imperante nos está haciendo sordos para escuchar el murmullo último de las cosas creadas”. “¿De qué nos sirve una tierra llena de hombres que controlan las máquinas, pero no comprenden las almas?”, se pregunta monseñor Asenjo.
El éxito de estos procesos radica, pues, en una justa combinación de dinámicas y propuestas en las que se tengan presentes las posibilidades que la técnica aporta a la tarea evangelizadora, sin convertir al usuario en lo que el Arzobispo califica como “un analfabeto espiritual, con serias dificultades para afrontar la muerte o mirar al futuro con esperanza”. El proceso está iniciado, no hay marcha atrás.