I Encuentro Diocesano de la Familia de Emaús Sevilla
Más de un millar de personas se congregaron la noche del pasado jueves en la Catedral de Sevilla para participar del I Encuentro Diocesano de la familia de Emaús, Effetá y Bartimeo de la Archidiócesis hispalense. Esta realidad pastoral inició su andadura en Sevilla hace ocho años con el primer retiro de Emaús mujeres coordinado por la Parroquia San Sebastián en 2016. Sucesivamente distintas parroquias sevillanas han acogido esta propuesta de primer anuncio nacida en Miami (EEUU).
El encuentro se celebró en el Altar del Jubileo y consistió en una meditación impartida por el arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz Meneses, sobre «La perspectiva de la vida cristiana y la evangelización». Seguidamente, los asistentes pudieron adorar a Jesús Sacramentado y dedicar tiempo a la oración personal.
La santidad concierne a todos los bautizados
Durante su reflexión, el arzobispo hispalense insistió en que la santidad es la perspectiva en la que debe situarse el camino pastoral. “No cabe otra perspectiva como ideal para todo cristiano que la de plantearse la perfección, la santidad, y en consecuencia, ésta es la única perspectiva posible en la pastoral juvenil. El joven cristiano no puede refugiarse en las limitaciones personales o en las dificultades ambientales y tampoco en la idea de que se trata de una gracia reservada a unos pocos privilegiados. La llamada a la santidad concierne a todos los bautizados.”
En este sentido, don José Ángel esbozó siete líneas de fuerza para el evangelizador: Profundidad espiritual, sólida formación, acción evangelizadora, vivir la pertenencia y el amor a la Iglesia, consistencia personal, alegría y solidaridad con el sufrimiento humano.
En definitiva, monseñor Saiz Meneses subrayó que “el cristiano que cultiva su espiritualidad y su formación, que se compromete en la Iglesia y en el mundo, que procura ser austero respecto a sí mismo y solidario con los demás, y que transmite la alegría del Evangelio, se convierte en un auténtico testigo de Jesucristo en el mundo de hoy. No habla de memoria ni repite un discurso teórico. Lo que comunica es su propia experiencia, su vida nueva tras haber encontrado al Señor. El encuentro con Cristo, la unión con Él, la fe vivida con intensidad y con pasión suscita un estilo evangelizador, testimonial, convencido y convincente, porque quien ha encontrado a Cristo no puede reservarse ese tesoro egoístamente, sino que tiende a compartirlo con los demás. Un testimonio que ha de ser valiente y decidido, a la vez que prudente y lleno de amor a los hermanos; que se ofrece con la palabra y con la vida, sin ocultar nunca la identidad cristiana”.
El sacerdote Antonio Guerra, párroco del Corpus Christi y coordinador de los retiros de Emaús Sevilla, agradeció infinitamente a Dios porque en ocho años de andadura, “los retiros de Emaús han permitido que 2570 mujeres, 1190 hombres, 1320 jóvenes de Effetá y 250 jóvenes de Bartimeo, estén hoy más cerca de Dios y de la Iglesia. Emaús tiene la virtud de acercar a la persona a Cristo resucitado, de ahí el amor a la adoración al Santísimo y a la Eucaristía».
Actualmente los retiros de Emaús se ofrecen en las parroquias de San Sebastián, Corpus Christi, Santa María Magdalena, San Bernardo, Espíritu Santo (Mairena del Aljarafe), San Juan Pablo II (Montequinto), Iglesia Mayor de Santa Cruz (Écija), San Sebastián (Alcalá de Guadaíra), Asunción (Osuna). Los retiros de Effetá en la Parroquia Espíritu Santo (Mairena del Aljarafe), Parroquia San Juan Pablo II (Montequinto), Parroquia San Vicente (Sevilla), Parroquia San Antón (Carmona)
Y, finalmente, los retiros de Bartimeo: Parroquia San Juan Pablo II (Montequinto), Parroquia Corpus Christi (Sevilla) y Parroquia San Vicente (Sevilla).