La Colecta para Tierra Santa se traslada al 13 de septiembre
El Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, el Cardenal Leonardo Sandri, ha informado esta semana que la tradicional colecta para los Santos Lugares, que tiene lugar cada Viernes Santo, se pospone para el 13 de septiembre, dado que las “medidas preventivas” establecidas para contener la actual pandemia “impiden la celebración comunitaria normal de los Ritos de la Semana Santa”.
Según ha explicado a los medios vaticanos monseñor Sandri, este cambio, aprobado por el papa Francisco, es “un signo de solidaridad con las comunidades cristianas de Oriente Medio y sus estructuras, como hospitales y escuelas. Sin la ayuda recolectada el Viernes Santo, y con la pandemia que empeora la situación, estarían en grave sufrimiento”. Pero no solo es un gesto para con los cristianos de Tierra Santa, sino también para los del resto del mundo, que igualmente experimentan grandes dificultades derivadas de la pandemia: “Pensemos en la gente que está sin trabajo porque cierran todas las actividades: ¿cómo podemos pedir solidaridad para Tierra Santa?”, reflexiona el cardenal.
Exaltación de la Cruz
Para entender por qué se ha pospuesto esta colecta de la Iglesia Universal al 13 de septiembre, debemos remontarnos a Pablo VI, que instituyó esta cita cada Viernes Santo pensando en la culminación de la vida terral de Jesús, en su crucifixión. Por tanto, señalan desde la Congregación para las Iglesias Orientales, “esta fiesta del 13 de septiembre, que conmemora el hallazgo de la Cruz de Cristo por Santa Elena, permite en cierto sentido «tocar» aún más los sufrimientos y la redención del mundo realizada por Cristo”.
Si bien, el Papa reconoce que esta nueva fecha obligará a las Conferencias Episcopales a organizar esta colecta de manera diferente, pero no impedirá que recuerden “el sufrimiento de los hermanos y hermanas de las Iglesias y países de Oriente Medio y de todas las Iglesias orientales”.