“La Eucaristía sin caridad se convierte en culto vacío y la caridad sin la Palabra se arriesga a silenciar su origen”
Los obispos integrantes de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal, de la que depende Cáritas, han publicado un mensaje con motivo del Día de la Caridad, que este año se celebra el 23 de junio, festividad del Corpus Christi. El mensaje, que lleva por título ‘Y renuevas la faz de la tierra’, propone “hacer de nuestra vida una entrega creíble a los heridos por la vida”.
En su mensaje los obispos denuncian que “la belleza de la creación está siendo maltratada, contaminada, expoliada y sometida a la cultura del descarte”, y recuerdan la insistencia del papa Francisco recogida en su encíclica Laudato Si: “El desafío urgente de proteger nuestra casa común incluye la preocupación de unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral, pues sabemos que las cosas pueden cambiar”.
Y este cuidado de la “casa común” está intrínsecamente relacionado con el cuidado del hermano y la erradicación de la pobreza. Al respecto, los obispos se refieren en su mensaje a la solemnidad del Corpus Christi, Día de la Caridad, en el que “el Señor nos llama a descubrirle y a encontrarnos con su imagen en todos los hombres y mujeres, sirviéndole en cada uno de ellos, de modo especial, y con inmensa misericordia y compasión, en los más pobres, frágiles y necesitados”.
En esta línea, señalan que “hemos de pedir de manera reiterada ver con los ojos del corazón, asombrarnos y custodiar la dignidad del hombre. Los ojos de la fe son los que ven lo bello de cada persona y se maravillan ante la belleza de la creación y el amor sin límites del Creador”.
También destacan que en la festividad del Corpus Christi “la Iglesia nos recuerda que la Eucaristía sin caridad se convierte en culto vacío” y que “la caridad sin la Palabra se arriesga a silenciar su origen”, por lo que agradecen aquellas “manos generosas al servicio de la caridad que dedican su tiempo y entregan su persona al servicio de los necesitados en Cáritas y en otras instituciones de la Iglesia”.
Los obispos integrantes de la Pastoral Social de la CEE concluyen su mensaje con motivo de la celebración del Día de la Caridad pidiendo al Espíritu Santo que “haga de nuestra vida una entrega creíble en todo momento a los ‘heridos por la vida’: pobres; sedientos de Dios; transeúntes; emigrantes con sus adversidades; refugiados; familias desestructuradas; marginados; personas atrapadas y esclavizadas por las drogas, el alcohol u otras dependencias; la trata de mujeres en la esclavitud de la prostitución; las estrecheces por las que pasan los desempleados; ancianos solos; enfermos mentales; y necesitados de compasión”.
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