Archidiócesis de Sevilla

El trabajo de restauración de la linterna del templo parroquial ha sacado a la luz detalles que el tiempo, los problemas de mantenimiento  y las filtraciones de la lluvia han ocultado durante décadas. Según uno de los restauradores, José Joaquín Fijo,  “se ha rescatado la decoración original de la bóveda de la linterna”. Mientras antes se podía apreciar un fondo pictórico gris, el minucioso trabajo de separación de materiales ha sorprendido con la aparición de restos de la pintura original de color blanco con líneas doradas y filos negros (siglos XVII-XVIII).

Además, el equipo formado por José Joaquín Fijo, Almudena García y el arquitecto Miguel Ángel López López,  ha reconstruido el sol que culmina la linterna, su leyenda y los temples.  También se ha restaurado el rosario, la rocalla y greca de la bóveda. Y un aspecto muy importante: se han consolidado y fijado los morteros.  Hace unos meses se colocó una red de protección debido al peligro que entrañaba el desprendimiento y la caída de estos elementos para los fieles y visitantes del edificio.

Colecta para recaudar fondos para las obras

Según se informa en la web de la parroquia sevillana, a partir de mañana las misas se volverán a celebrar en el altar mayor. Los trabajos de restauración de la linterna se han realizado durante el mes de agosto. Mientras tanto,  la disposición de los bancos se ha cambiado, de modo que el altar para celebración de las misas ha estado ubicado en el bajo coro del templo parroquial. La restauración ha sido inaplazable por los riesgos que comportaba. Ha tenido un coste de unos 30.000 euros y será financiada gracias al apoyo de sus feligreses y hermandades. Para ello se realizará una colecta extraordinaria los días 19 y 20 de septiembre, pudiéndose contribuir también a través de la cuenta 3187 0343 61 2960584122, Caja Rural (concepto ‘restauración cúpula’). Según el párroco de Santa María Magdalena, Francisco Román, «como suele decirse, se ha hecho lo que se debía y ahora debemos lo que hemos hecho. No obstante, tengo una plena confianza en la generosidad de nuestros feligreses y hermandades, que desde el cariño a su parroquia con seguridad seguirán volcándose con ella».

En los próximos años, y en la medida de lo posible, se aprovecharán los días de agosto para seguir realizando obras necesarias para el mantenimiento de uno de los templos más importantes de la Archidiócesis de Sevilla.

(Fotos: José Joaquín Fijo. Reportaje gráfico en este enlace).