Mons. Saiz Meneses ante el retablo del Sagrario: «La contemplación de esta obra de arte es un camino propicio para el encuentro con Dios»
Casi siete meses después de que el equipo técnico de la Delegación Diocesana de Patrimonio comenzara los trabajos de restauración del retablo mayor de la iglesia parroquial del Sagrario, esta mañana se ha celebrado la misa de acción de gracias por la finalización de unas actuaciones que han devuelto el esplendor original al retablo que tallara Pedro Roldán y policromara Valdés Leal. La misa ha sido presidida por el arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz, y concelebrada entre otros sacerdotes por el párroco del Sagrario, Manuel Cotrino; el deán del Cabildo, Francisco José Ortiz; el delegado de Patrimonio Cultural, Antonio Rodríguez Babío; y el rector del Seminario, Andrés Ybarra.
En su homilía, el arzobispo ha hecho un recorrido por la historia del retablo, destacando las valiosas aportaciones de artistas de primer nivel. Además, ha subrayado que esta celebración es «una acción de gracias a Dios por la finalización de los trabajos de restauración de este bellísimo retablo, que ha recuperado su esplendor original».
A lo largo de su homilía ha hecho una reflexión sobre la relación entre el arte, manifestado en el concepto de belleza, y la fe. En esta línea, ha destacado hasta qué punto “la contemplación de esta obra de arte, con toda la belleza que contiene, es un camino propicio para el encuentro con Dios, que es la Belleza suprema, la Belleza infinita, y una ayuda magnífica para nuestra vida de oración”.
El arzobispo de Sevilla ha señalado que “las auténticas obras de arte elevan el espíritu, ayudan a abrir los ojos de la mente y del corazón, nos impulsan hacia lo alto, nos hacen trascender. Más aún, hay expresiones artísticas que son auténticos caminos hacia Dios, que ayudan poderosamente a crecer en la relación con él, a entrar en la oración. Obras de arte que nacen de la fe, que expresan la fe y que impulsan la fe de quien las contempla en silencio y recogimiento interior. Así se cumple en este retablo”.
En esta Eucaristía han participado representantes de todas las hermandades de la feligresía, así como de las instituciones implicadas en los trabajos de restauración del retablo, de forma especial los restauradores y coordinadores de la Delegación Diocesana de Patrimonio Cultural, responsables directos de una actuación cuyo resultado está, siete meses después, a la vista de todos.