SOBRE LA BLANCA PALOMA
El programa del pasado viernes 9 comenzaba con un recordatorio: la fiesta de la dedicación de la basílica de San Juan de Letrán, la catedral del Papa. Un buen día para recordar que la Iglesia es comunión, es fraternidad, es amor. Y no un amor inspirado por las legítimas aspiraciones humanas de un mundo mejor. La Iglesia es comunión y amor porque su único fundamento es Jesucristo y el Evangelio es nuestra norma de vida y actuación.
“El Espejo de Sevilla” tiene que estar pegado a la actualidad. Y la actualidad en el pasado programa también pasaba por la manifestación convocada contra el párroco de La Blanca Paloma, en Sevilla. Más ruido que nueces, porque si uno lee algún titular de prensa local de días anteriores, se encontraba con el inquietante presagio “Un barrio contra su párroco”. Los treinta asistentes, aproximadamente, pueden formar ruido (no es difícil) pero desde luego no son las nueces que decían ser un barrio entero.
La información está en la nota oficial que puede leerse en la sección de noticias de esta página web de la Archidiócesis. Permítanme que exponga mi opinión personal.
En la Iglesia no tienen cabida los gritos, los insultos ni las amenazas (que aunque sean mediante indirectas, siguen siendo amenazas). En nosotros, esos modos sólo encuentran una respuesta: seguir anunciando a Cristo. Porque para eso, y no para otra cosa, estamos. Un anuncio que toma forma en el silencio de la oración, o en la celebración de la fe en los sacramentos, o en la catequesis, o en la ayuda concreta a los pobres, incluyendo la promoción y el desarrollo. Es decir, en la vida de una parroquia. Esto es lo que hacemos. Esto son nuestros principios. Y, al contrario de la célebre cita de Marx, el de nombre Groucho, no vamos a cambiarlos porque a algunos no les guste o pensaban que nos dedicábamos a otras cosas. Por mucho que nos griten.
Hay que agradecer al párroco, vicario parroquial y fieles de la Parroquia de la Blanca Paloma su generosidad para afrontar todos estos hechos con serenidad y con misericordia.
PD: En el audio del programa, cuyo enlace está en la parte derecha de este blog, además de la entrevista a Félix Quijada, vicepresidente de Cáritas, no se pierdan la sabiduría de un científico creyente, nuestro contertulio Manuel Alcalde. Nos explica cómo descubrir a Dios en una gota de agua.
Marcelino Manzano.