Colegio diocesano San Bernardo: “Un centro concertado con vida parroquial”
El Colegio San Bernardo es un centro concertado diocesano en el que la formación integral de la persona es la base de todo. Cuenta con más de cuatrocientos alumnos divididos entre infantil, primaria, secundaria y formación profesional. Siempre ha dependido de la parroquia de San Bernardo desde su creación en los años cincuenta, cuando movido por ayudar a la inserción de la mujer en el mundo laboral, se crearon los talleres de formación profesional y posteriormente el resto del complejo educativo actual.
En la actualidad, la labor pastoral del centro es un hecho diferencial respecto a otros de la zona. Posee un Plan Pastoral que se elabora con las directrices del Director Espiritual Mario Fermín y Párroco de San Bernardo, que se extiende a lo largo de todo el curso y que está dirigido no sólo al alumnado sino también al profesorado que debe atenderlos diariamente en todas sus necesidades.
Referido a la formación académica “tratamos de buscar una educación integral de la persona trasmitiendo una serie de valores que les ayuden a ser buenos cristianos y honrados ciudadanos”, comenta su director, Antonio Macías. Esto es posible gracias a la implicación de toda la comunidad educativa, obteniendo siempre óptimos resultados en todos los sentidos.
Asimismo, se ofrecen otros muchos servicios en el colegio: existe un aula de apoyo para facilitar la integración de niños con necesidades especiales; hay numerosas actividades extraescolares en las que participan un gran número de alumnos; y cuenta con servicio de aula matinal y comedor. Además, es un centro bilingüe en todas sus etapas educativas.
Otro aspecto destacable es la formación actualizada de sus docentes en todos los ámbitos debido a los trasversal de la misión que estos desempeñan.
No menos importante es el AMPA, que ofrece apoyo a los padres del alumnado y organiza actividades. “Es muy potente”, asegura el director del colegio, y está formado por personas que conocen el mundo de la educación por lo que “trabajan con un gran conocimiento de causa y profesionalidad”.
Es un edificio lleno de vida y de valores que surge como fruto de la entrega y el cariño por el alumnado y su educación, perteneciente a la Fundación Diocesana de Enseñanza «Victoria Díez».
