Un poco más cerca del Centro Diocesano de Empleo, gesto por el Año de la Misericordia
El pasado 28 de abril se dio un paso más dentro del proyecto del Centro Diocesano de Empleo, iniciativa diocesana con motivo del Jubileo de la Misericordia. El Arzobispo de Sevilla, mons. Juan José Asenjo, firmó ese día un decreto por el que dispuso la creación del citado centro que tendrá su sede en el edificio de titularidad de la Archidiócesis de la calle Chucena, número 22-24, en el barrio de Palmete.
El Centro, que será gestionado por Cáritas Diocesana, responde a la intención del Arzobispo de concretar en un hito determinado los frutos del Año de la Misericordia. Al respecto, mons. Asenjo ha asegurado en el citado decreto que “la misión prioritaria de la Iglesia es ser signo y testimonio de la misericordia en todos los aspectos de su vida y actividad”. Por este motivo, siguiendo las intenciones del Papa, la Archidiócesis de Sevilla después de haber estudiado diversas alternativas, “teniendo en cuenta la precaria situación social que provoca en muchas ocasiones la falta de un trabajo digno, considero oportuno concretar el gesto jubilar en la creación integral que ayude a paliar la lacra de la escasez de empleo”.
Este centro se financia gracias a los donativos recaudados en las peregrinaciones que los fieles realizan a los siete templos jubilares de la Archidiócesis Sevilla este Año Jubilar.
Centro Diocesano de Empleo
Cáritas Diocesana será quien gestione este centro cuyo objetivo principal es la integración socio-laboral. El empleo, aseguran, es “un elemento privilegiado de integración social, debido a que es la principal vía de acceso a los recursos y a los procesos de socialización”. Desde la institución católica lo consideran como “un factor clave para la inclusión social y como el medio más eficaz para salir de la pobreza, no sólo porque genera ingresos económicos, sino también porque puede fomentar la participación social y el desarrollo personal”. Así mismo, reconocen que el desempleo se trata de un problema estructural, “fruto de nuestro modelo socioeconómico injusto”. Por ello, es necesario desarrollar propuestas concretas mediante actividades asequibles y asumible que abarque la mejora de la empleabilidad de las personas más desfavorecidas. El Centro Diocesano de Empleo está dirigido especialmente a personas en situación de vulnerabilidad o provenientes de situaciones de exclusión social –jóvenes sin estudios, desempleados de larga duración, con cualificación profesional nula o escasa, en situación económica precaria, inmigrantes, etc.- derivadas en su mayoría de las Cáritas Parroquiales u otros proyectos diocesanos.
Itinerario de inserción socio-laboral
El programa de Empleo Diocesano se organiza siguiendo la metodología del Itinerario de inserción socio-laboral, cuyo punto de partida es la acogida y cuenta de cuatro partes: la orientación socio-laboral; formación prelaboral –en pre-talleres- o formación para el empleo; empleo protegido, es decir, llevar a cabo acciones de intermediación y de economía solidaria con empresas de inserción; y, por último, trabajo con Cáritas Parroquiales, “